La administración Obama ha consultado expertos externos mientras evalúa la posiblidad de impartir sanciones a Irán sobre las importaciones de gasolina.

El senado de los Estados Unidos ha aprobado una ley que prohibiría que las compañías que vendan de productos refinados del petróleo a Irán provean a la reserve estratégica.

El presidente de la el comité de asuntos exteriores de la House of Representatives, Howard Berman, dijo que promocionará una ley que establezca sanciones a las compañías que exporten productos refinados del petróleo a Irán.

Estos esfuerzos buscan disuadir a las compañías de invertir en tecnología para la industria del petróleo y el gas en Irán, la cual ha sido duramente afectada por la inflación y el desempleo.

Las sanciones actuales prohíben a cualquier compañía invertir más de $20 millones de dólares en el sector, aunque nunca han sido aplicadas.

La idea con mayor fuerza es arremeter contra los suministros de gasoline. Pero los expertos en Irán, exportadores de crudo y transportistas previenen que aplicarlo ese tipo de sanción sería casi imposible.

"No podemos detener el flujo de gasolina sin el uso de la fuerza militar” dijo Patrick Clawson, experto en sanciones a Irán. “Pero ese tipo de sanciones causarían problemas económicos y malestar social, creando retos para el gobierno iraní” agregó.

Aún si se aprueba el proyecto de Berman, no es claro si se aplicará. La administración Obama ha declarado estar comprometida con el trabajo multilateral, por lo cual se mostrarán reacios a tomar compromisos unilaterales.

Rusia y China, naciones con fuertes lazos con Irán, han sido reticentes a impartir sanciones relacionadas con la provisión de energía. El ministro de relaciones exteriores de Francia, Bernard Kouchner ha pedido cautela al impartir sanciones que pueden dañar a los ciudadanos iraníes. Esto podría incluir las sanciones al combustible.

Volver