Asad esboza su plan de reconciliación pero rechaza dialogar con “títeres” de Occidente |
RIA Novosti, 6 ene 2013. El presidente de Siria, Bashar Asad, perfiló hoy un plan de arreglo que prevé la convocatoria de una conferencia para la reconciliación nacional y la formación de un nuevo Gabinete pero reafirmó su rechazo a la injerencia extranjera en el conflicto y descartó el diálogo con “títeres” occidentales. Al intervenir con un discurso a la nación, televisado en directo y el primero en varias semanas, Asad lamentó el gran número de víctimas y refugiados a raíz del conflicto que dura casi dos años pero reiteró que el pueblo sirio se opone a los extremistas que comparten la ideología de Al Qaeda y reciben armas y financiación desde el extranjero. Negó que sus oponentes representen una revolución, porque carecen de ideas y líderes, y los calificó de obscurantistas. El presidente esbozó una serie de medidas que, a su juicio, contribuirían a resolver la actual crisis. “La primera etapa de una solución política requeriría que las potencias regionales dejaran de financiar y armar” (a la oposición), manifestó. El Ejército podría entonces cesar las operaciones militares aunque se reservaría el derecho de defender los intereses del Estado. Una vez logrado el primer objetivo, el Gobierno entablaría contactos con “individuos y partidos políticos” para celebrar una conferencia de reconciliación. Al mismo tiempo, Asad subrayó que sería un diálogo con “aquellos que no han traicionado a Siria” y descartó la negociación con “un títere fabricado por Occidente”. La tercera fase consistiría en elaborar una especie de Carta Nacional y someterla a un referéndum, a lo cual seguirían las elecciones parlamentarias, la formación de un nuevo Gobierno y una amnistía. La intervención del presidente sirio, que tuvo lugar en la Sala de Ópera de Damasco y fue interrumpida más de una vez por aplausos, es la primera desde que en noviembre pasado anunció en una entrevista con la televisión rusa la decisión de “vivir y morir en Siria”. El conflicto en Siria causó más de 60.000 muertos y medio millón de refugiados desde marzo de 2011, según las estimaciones de la ONU. La Coalición Nacional de las Fuerzas de Oposición y la Revolución Siria (CNFORS), reconocida por 130 países, insiste en la dimisión de Bashar Asad. |