The Washington Post, 27 ago 2013.

La administración Obama se preparó el martes para un probable ataque militar contra Siria, reuniendo el apoyo aliado y juntando un importante respaldo árabe de la visión de que el presidente sirio, Bashar al-Assad, es casi con total seguridad culpable de un supuesto ataque con gases a civiles.

La Liga Árabe culpó al gobierno sirio por la el supuesto ataque con armas químicas que asesinó a cientos cerca de Damasco la semana pasada. En una reunión de emergencia el martes en el Cairo, la influyente organización árabe insto a que los responsables del ataque sean llevados a la justicia internacional.

Los 22 miembros distaron de apoyar un la acción militar extranjera, pero urgieron al Consejo de Seguridad de la ONU a que acuerde medidas de “disuasión”.

El Ministro de Relaciones Exteriores de arabia Saudita, en cargo desde hace mucho tiempo, agregó que se requiere un soporte internacional “serio y decidido” contra Siria.

Siria rechaza su responsabilidad vehementemente por el ataque, el cual dejó más de trescientos muertos y muchos heridos. El ministro de Relaciones Exteriores del país, Walid Al- Moulem, dijo que el ejército sirio defendería al país contra cualquier intervención extranjera.

“Escuchamos tambores de guerra alrededor nuestro,” dijo Moualem el martes. “si quieren atacar Siria, creo que el uso de la mentira de armas químicas es falsa e inexacta, y los desafío a mostrar evidencia.”

Dijo que la idea de un ataque militar para cambiar el balance de poder en Siria, el cual se ha visto en una atroz guerra civil desde hace más de dos años, es “delirante e imposible”

El secretario de prensa de la Casa Blanca, Jay Carney, dijo que cuando Obama “tiene una decisión y un anuncio que hacer lo hace.” Carney enfatizó que los Estados Unidos ya están convencidos, junto con otras naciones, de que ocurrió un ataque con armas químicas y que el gobierno de Assad fue el responsable. La una decisión pendiente para el presidente, dijo, es “¿Cuál es la apropiada respuesta para esta clara violación de las normas internacionales?

Carney y otros funcionarios se negaron a dejarse arrastrar dentro de la discusión de los tiempos de respuesta. Se espera que se publique un informe de inteligencia de los Estados Unidos con evidencia de la responsabilidad de Assad por el uso de las armas químicas esta semana.

El Secretario de Defensa Chuck Hagel dijo a BBC News el martes que el Pentágono ha cumplido con la orden del Presidente Obama de dar alternativas para todas las contingencias.

“Las ha visto, estamos preparados,” dijo Hagel, “movimos recursos con el fin de estar en condiciones de cumplir y completar cualquier opción que el presidente desee tomar. Ahora estamos listos para marchar”

Según funcionarios del congreso, delegados de la Administración Obama han comenzado a notificar a algunos miembros del congreso por un posible ataque militar, aunque la Casa Blanca diga que no hay una decisión final tomada al respecto. Lo llamados son para informar y no buscan permiso, dijo uno de los funcionarios del congreso. Los oficiales hablan bajo condición de guardar el anonimato para describir el silencioso esfuerzo de obtener el respaldo del congreso

Aunque Obama está sopesando un número de opciones preparadas por el pentágono, funcionarios de los Estados unidos dijeron que el ataque sería de limitado alcance y duración, principalmente usando armas de lanzamiento a distancia como los misiles de crucero lanzados desde el mar, o los bombardero de larga distancia diseñados tanto como para enviar un mensaje de alerta y determinación, como para dañar seriamente al régimen.

Entre los objetivos bajo consideración se encuentran bases de la Fuerza Aérea Siria y aeronaves e instalaciones de control y mando. Es poco probable que los depósitos de armas químicas sean un blanco debido a su número y amplia dispersión, y también debida a la necesidad de evitar daños colaterales civiles.

La administración también está debatiendo una justificación legal internacional para el ataque, la cual probablemente no sea aprobada por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, donde Rusia y China han vetado varias resoluciones relacionadas con Siria. El ataque aéreo de la Coalición de la OTAN sobre Libia en 2011 tenía un mandato de la ONU, pero no así el bombardeo de la OTAN sobre la ex Yugoslavia en 1999.Los acuerdos de la OTAN son por consenso, siguiendo un pedido para la acción de un Estado Miembro. Hasta ahora, no ha habido ningún pedido de ninguno de los 28 miembros de la alianza.

Las encuestas tomadas antes de las muertes de la última semana mostraban consistentemente unos Estados Unidos opuestos a la intervención norteamericana en Siria. Complicando la tarea política de Obama, cualquier acción militar ahora, incluso una muy breve, pone en duda su larga oposición a una nueva guerra en Medio Oriente y puede enojar a algunos de sus partidarios progresistas.

La acción prevista para satisfacer las pruebas legales de de Estados Unidos y la comunidad internacional sin terminarla guerra civil en siria ni forzar a Assad a dejar el poder, según informaron funcionarios del congreso y del ejecutivo. La meta de la breve campaña con armas de largo alcance también expresaría la indignación internacional del aparente uso de agentes neurotóxicos prohibidos y limitar la capacidad de Asad de llevar a cabo más ataques, dijeron las autoridades. Pero no sería un ataque directo a los restantes arsenales de armas químicas de Assad, en gran parte debido a la preocupación de que un ataque podría desperdigar dichos agentes.

Los preparativos para la acción militar entre los Aliados de Estados Unidos fueron claros. Desde las oficinas del primer ministro británico se dijo que las fuerzas del país estaban elaborando planes de contingencia para una respuesta “proporcional” al supuesto ataque con armas químicas en Siria, mientras que Francia afirmó que estaba listo para “castigar” a los responsables, planteando la posibilidad de que las naciones europeas podrían conducir un ataque militar conjunto liderado por Estados Unidos.

El primer ministro británico, David Cameron, interrumpió unas vacaciones para volver a Londres y anunciar que el llamaría el jueves al Parlamento para discutir una posible respuesta militar en la capital.

En un discurso televisivo el presidente francés, François Hollande, dijo que era responsabilidad del mundo tomar acción.

“Francia está lista para castigar a aquellos que toman la decisión de atacar con gas a inocentes,” dijo Hollande.

El Presidente Obama habló el martes con el Primer Ministro canadiense, Stephen Harper, “para discutir sus profundas preocupaciones por el presunto uso de armas químicas contra civiles por el régimen sirio”, dijo la Casa Blanca. “Los Estados Unidos, y Canadá, se oponen fuertemente al uso de armas químicas, y sus Presidente y Primer Ministro se comprometen a seguir consultando estrechamente respuestas potenciales de la comunidad internacional.”

Por su parte, se levantaron quejas en el congreso contra cualquier acción militar sin consulta al legislativo. Un pequeño grupo de representantes plano enviar una carta a Obama el miércoles diciendo que, de ser necesario, el congreso se reuniría de nuevo para considerar de antemano a un ataque.

El Secretario de Estado, John F. Kerry, durante una conferencia en el Departamento de Estado comenzó a hacer el caso legal y moral para una respuesta de Estados Unidos. Kerry prometió que los Estados Unidos tienen más evidencia sobre el ataque y los culpables, y la presentaría en los próximos días. Dejo en claro que los Estados Unidos confiaran en su propia información para elegir sus próximos pasos, y pueden no esperar por la palabra final de los inspectores de las Naciones Unidas, actualmente en el lugar del evento.

Kerry dejo pocas dudas de que la decisión de los Estados Unidos no es si tomar o no acciones, sino cuando tomarlas.

Según Kerry “el Presidente hará pública una decisión informada sobre cómo responder. Pero no se engañen, el Presidente Obama cree que debe haber una redición de cuentas por parte de aquellos que usen las armas más dañinas del mundo,” dijo Kerry en breves declaraciones a la prensa en el Departamento de estado

Funcionarios de los Estados Unidos resaltaron que su país no actuará solo.

No está claro si los aliados comprometerán recursos militares para una campaña de bombardeos, aunque probablemente Francia y Gran Bretaña lo hagan. Es improbable que cualquier acción sea tan amplia como la campaña aérea de la OTAN de 2011 sobre libia, la cual involucró a más de una docena de Estados.

La OTAN se siempre se ha opuesto a una intervención en Siria, pero un ataque con armas químicas puede cambiar sus mentes o, al menos de algunos miembros de la alianza. No está claro si la administración Obama buscará un mandato de la OTAN para la acción. Un mandato de las Naciones Unidas está lejos de lograrse debido a la oposición rusa.

Los inspectores de la ONU obtuvieron acceso el lunes a uno de los sitios donde la semana pasada sucedieron los supuestos ataques con armas químicas. Y pasaron tres horas entrevistando a testigos y recolectando evidencia, a pesar de que su convoy estuvo brevemente bajo fuego de francotiradores al principio del día.

Tras el incidente, un segundo día de investigaciones fue pospuesto para el martes. Las naciones unidas rechazaron comentar, alegando que la asignación de culpas podría poner en peligros las negociaciones para alcanzar con seguridad las zonas afectadas por el ataque.

Loveday Morris y Ahmed Ramadán en Beirut y Anthony Faiola y Karla Adam en Londres contribuyeron a este reportaje.

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