Rusia "tiene serios interrogantes" sobre el objetivo real del nuevo proyecto de escudo antimisiles estadounidense en Europa, declaró este viernes el portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores ruso, Andrei Nesterenko.

"Seguimos teniendo serios interrogantes sobre el objetivo real del sistema antimisiles estadounidense", declaró Nesterenko durante una conferencia de prensa.

"Nos seguiremos oponiendo a todos los actos dudosos y unilaterales que puedan tener un impacto negativo en la seguridad internacional", añadió.

Rumanía se declaró dispuesta a acoger en su territorio elementos del escudo antimisiles estadounidense, que vuelve a ser motivo de discordia entre Moscú y Washington.

"Somos de nuevo testigos de decisiones precipitadas en el ámbito de la defensa antimisiles en Europa", consideró Nesterenko, que critica la falta de transparencia de los rumanos y los estadounidenses.

"Nos preocupa enterarnos de las decisiones" a través de la prensa, afirmó el portavoz, quien recalcó que esta forma de obrar no se corresponde con "el enfoque de cooperación en pie de igualdad en el campo de la defensa antimisiles" solicitado por Moscú.

La Casa Blanca decidió en septiembre renunciar a un proyecto inicial de escudo antimisiles en Polonia y la República Checa, elaborado durante el mandato de George W. Bush y centrado en una amenaza de disparos de misiles iraníes de largo alcance.

Lo cambió por un sistema que protege principalmente contra los disparos balísticos de corto y medio alcance, que inicialmente fue bien acogido por Moscú.

Nesterenko lamentó el viernes que la seguridad europea se convierte en "la rehén de supuestas amenazas de misiles definidas de manera unilateral", que parecen restar importancia al peligro que, según Estados Unidos, representa Irán.

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