Promesas, Promesas: los resultados mixtos de Obama sobre las armas nucleares |
AP El 5 de abril de 2009, el nuevo presidente de los Estados Unidos se paró a las puertas del castillo de Praga al frente de 20.000 checos ondeando banderas y ofreció lo que sería un momento decisivo para su presidencia: el compromiso de buscar un mundo sin armas nucleares. Destacó pasos concretos para alcanzar ese objetivo. Dos años más tarde, el presidente Barack Obama ha cumplido algunas de sus promesas, mientras que otros objetivos parecen estancados. He aquí una mirada sobre dicho progreso. Promesa: "Para reducir nuestras ojivas e inventarios, negociaremos un nuevo Tratado Estratégico de Reducción de Armas con los rusos este año." Seguimiento: El gobierno logró el tratado, pero tomó más tiempo de lo previsto. El tratado Nuevo START fue firmado un año después del discurso. Después de un duro camino en el Senado, fue ratificado por los EE.UU. en diciembre y luego por la Duma de Rusia en enero. El tratado reduce el límite a las ojivas desplegadas a 1.550, siendo 2.200 el límite anterior. Las dos partes ya estaban muy por debajo del límite anterior por lo que la reducción efectiva de las ojivas será modesta. Seguimiento: Obama está buscando un nuevo tratado con Rusia que permita reducciones adicionales para las ojivas desplegadas, así como para aquellas de corto alcance y las no desplegadas, no incluidas en el Nuevo START. Pero la discordia por los planes de EE.UU. de defensa antimisiles en Europa es un escollo. Obama también enfrenta una creciente resistencia a nuevas reducciones por parte de los republicanos y tiene en el camino su propia reelección el próximo año. Por lo que cualquier nuevo tratado está, probablemente, a años de alcanzarse. La administración ha llamado a realizar conversaciones multilaterales sobre arsenales nucleares que podrían incluir a los países europeos y asiáticos, pero hay poca evidencia de que China, el país clave, esté dispuesto a hablar acerca de los límites de su política nuclear mantenida en secreto. Mientras tanto, el gobierno está buscando otras maneras de reducir su arsenal. Un alto funcionario, que habló bajo condición de anonimato debido a lo delicado de la cuestión, confirmó que EE.UU. está considerando estos cortes independientemente de las negociaciones con Rusia. Seguimiento: Los esfuerzos de la administración apenas han sido inmediatos o agresivos. Parece que hay pocas esperanzas de lograr la aprobación del tratado en el corto plazo. La aprobación del tratado de prohibición de los ensayos, rechazada por el Senado en 1999, sería una venta más difícil que el Nuevo START, que fue ratificado sólo después de una dura pelea y con una amplia mayoría demócrata. El gobierno continua diciendo que está comprometido con el tratado. Seguimiento: La administración ha impulsado en un foro de las Naciones Unidas la prohibición de la producción de uranio grado armas y plutonio. Pero las negociaciones se han estancado por Pakistán y otros países. El gobierno ha amenazado a negociar un acuerdo sin los países que actualmente bloquean esta posibilidad. Seguimiento: El año pasado, Obama recibió a 47 países en una cumbre de seguridad nuclear que buscó obtener compromisos para asegurar los materiales nucleares. Un informe que pronto será publicado por dos ONGs, la Arms Control Association y la Partnership for Global Security concluye que los países están en buen camino para cumplir sus compromisos. Entre los logros ya obtenidos se encuentran los siguientes:
Pero los compromisos contraídos en la cumbre no eliminan la amenaza de que los materiales nucleares puedan caer en manos equivocadas. Es poco probable que Obama, por ejemplo, logre asegurar los materiales nucleares de Corea del Norte en el corto plazo. Seguimiento: Una revisión del Departamento de Defensa finalizada un año después del discurso estableció límites claros sobre las circunstancias en que EE.UU. podría lanzar un ataque nuclear. La política anterior era intencionalmente ambigua. La revisión, dijo que el papel fundamental de las armas nucleares de los EE.UU. era la disuasión. EE.UU. se comprometió a no amenazar o usar armas nucleares contra Estados sin armas nucleares que cumplan con el tratado de la ONU sobre la no-proliferación. Traducción: NPSGlobal |